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Diferencias entre Incubadoras y aceleradoras

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Supongamos que tenemos un proyecto que queremos desarrollar para convertirlo en empresa. Para poder materializarlo tendremos que valernos de recursos para que comience a tener visibilidad y que potenciales inversores decidan apostar por la empresa. Nuestra futura Startup, por norma general, tendrá que pasar por dos fases: primero la de incubación y posteriormente la de aceleración. En este post os vamos a explicar cuáles son las diferencias entre incubadoras y aceleradoras y por qué apostar por cada una de ellas.

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Diferencias entre Incubadoras y Aceleradoras

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¿Qué es una incubadora?

Una incubadora es una empresa que se encarga de buscar futuras startups que posean potencial para salir al mercado. Para ello cuentan con expertos y asesores que trabajan, junto con los CEOs de cada una de estas startups, desarrollando sus proyectos hasta que cogen forma. El proceso de incubación está dividido en tres fases:

  • Pre-incubación

Desarrolla el plan de negocio que va a tener la startup; con ello buscamos definir claramente cuál es el modelo de negocio, el público al que va destinada la empresa y el plan estratégico de acción.

  • Incubación

A lo largo de un año vemos la evolución de la empresa gracias al plan de negocio, que hemos diseñado en la fase anterior además de dividir las distintas tareas según los departamentos: producción, marketing, logística, etc..

  • Post-incubación

Tenemos que hacer un seguimiento de la evolución del proyecto para poder analizar sus expectativas de crecimiento y expansión a medio y largo plazo.

¿Qué tipos de incubadoras y aceleradoras existen?

Existen varios tipos de incubadoras, muchas de ellas se pueden centrar en un nicho de mercado en concreto, pero generalmente abarcan todo tipo de proyectos.

Por el camino también podemos encontrar otras como Lanzadera, Cloud Incubator o Impact. La gran mayoría se dedican a buscar la mentorización personal para cada uno de los proyectos, permitiendo así un trabajo cercano con los CEOs de cada una de las startups.

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Por ejemplo, en la ciudad de Barcelona podemos encontrar un vivero de empresas que están en contacto las unas con las otras dentro del espacio Barcelona Activa. En este vivero conviven numerosas empresas de todo tipo de sectores con el fin de ir escalando puestos en el mundo de las startups.

¿Qué es una aceleradora?

A diferencia que la incubación, la Aceleradora se dedica a acelerar un proyecto que está ya se encuentra en desarrollo. El principal objetivo de esta acción es el de obtener beneficios reales nada más salir la empresa al mercado.

Un proceso de aceleración se vale de técnicas ágiles para facilitar la transición de ideas sólidas a hechos reales. El trabajo del mentoring es esencial para que el proyecto avance con una mayor rapidez.

¿Qué tipos de aceleradoras podemos encontrar?

Una de las primeras aceleradoras de nuestro país en el sector TIC es Seedrocket. Esta aceleradora, que también hace de incubadora, y que ha sido de las primeras en España en comenzar a lanzar proyectos con varias Startups. Tiene sedes tanto en Madrid como en Barcelona y su equipo se sustenta en expertos de varios sectores para mentorizar a los futuros candidatos. Ejemplos los encontramos en empresas como Offerum o Kantox como casos de éxito que han salido de Seedrocket.

Una vez que hayamos consolidado la empresa, hay que buscar la financiación necesaria que permita que crezcamos como empresa. Existen numerosos tipos de inversión en startups, no obstante nosotros recomendamos un modelo innovador, el Pledge Fund.

¿Cuál es la mejor opción?

En función en la fase en la que se encuentre tu empresa será más conveniente apostar por una aceleradora o una incubadora, no obstante te animamos que si tienes una idea en mente que llevas queriendo desarrollar te acabes lanzando a la piscina.

¿Te ha quedado claro cuáles son las diferencias entre incubadoras y aceleradoras? Para todos ellos existe un MBA en emprendimiento digital que te permite comenzar a dar tus primeros pasos en tu propia empresa.Serás capaz de desarrollar y validar tu idea y modelo de negocio, plantear una estrategia de crecimiento empresarial y aprender las competencias y habilidades imprescindibles para tener éxito en un emprendimiento de base tecnológica y de internet.

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Paula Canal

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