
Imágenes cortesía de 1X Technologies
Durante años, la robótica doméstica ha sido un sueño a medio camino entre la ciencia y la ficción. Hoy, ese sueño empieza a materializarse con 1X NEO, el nuevo robot humanoide creado por la compañía noruega con sede en Palo Alto, San Francisco, 1X Technologies, diseñado no solo para realizar tareas del hogar, sino para convivir y aprender junto a las personas.
Su llegada marca un punto de inflexión: por primera vez, un robot con apariencia y comportamiento humano está disponible para el público general, con un precio cercano a 20 000 dólares o mediante un modelo de suscripción mensual de 499 USD, lo que facilita un acceso más gradual a esta tecnología emergente.
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Un diseño pensado para convivir, no solo para impresionar
A diferencia de los robots industriales, fríos y mecánicos, NEO se presenta como una figura amable y contemporánea. Su cuerpo, de unos 30 kilogramos, combina materiales ligeros, líneas suaves y un sistema de movimiento flexible que reproduce la biomecánica humana.
El innovador mecanismo Tendon Drive, inspirado en el funcionamiento de los músculos, le permite desplazarse, agacharse y manipular objetos con una naturalidad sorprendente.
Equipado con sensores visuales, micrófonos direccionales y una red neuronal de comprensión contextual, NEO puede observar, escuchar y aprender del entorno. Su diseño no busca asombrar, sino integrarse en la vida cotidiana, demostrando que la robótica del futuro no tiene por qué ser intimidante, sino cercana y útil.
Funciones que acercan la ciencia ficción a la realidad

Imágenes cortesía de 1X Technologies
El 1X NEO está concebido como un asistente doméstico colaborativo, con la capacidad de adaptarse al hogar humano. Sus funciones iniciales incluyen:
- Tareas básicas del hogar, como ordenar objetos, limpiar superficies o transportar elementos ligeros.
- Asistencia personalizada, respondiendo preguntas, recordando citas y ayudando a gestionar rutinas.
- Movilidad autónoma, desplazándose con seguridad y evitando obstáculos.
- Interacción natural, capaz de comprender lenguaje hablado y responder con tono y gestos coherentes.
- Aprendizaje progresivo, mejorando sus habilidades con el uso y adaptándose a las costumbres del usuario.
- Conectividad inteligente, mediante aplicación móvil o gafas VR, con sincronización con dispositivos domésticos conectados.
Aunque estas funciones son un hito tecnológico, 1X Technologies reconoce que se trata de una primera etapa. NEO aún no es un robot universal, y muchas de sus capacidades evolucionarán con el tiempo a través de actualizaciones y aprendizaje colectivo.
Una innovación que exige prudencia
El entusiasmo que genera NEO es comprensible: simboliza el comienzo de la convivencia entre humanos y robots. Sin embargo, como toda tecnología de frontera, requiere prudencia y expectativas equilibradas.
En sus primeras versiones, NEO puede tener limitaciones de autonomía, comprensión o ejecución. No todas las tareas que imagina el usuario serán posibles de inmediato, y su capacidad para desenvolverse de forma totalmente independiente aún está en desarrollo.
No obstante, la historia de la tecnología demuestra que las innovaciones de este tipo evolucionan con rapidez exponencial. Lo que hoy parece una curiosidad experimental puede convertirse en pocos años en un estándar doméstico.
El propio diseño modular y el sistema de actualizaciones de NEO permiten anticipar una mejora constante, impulsada por inteligencia artificial y aprendizaje distribuido.
Por eso, más que una máquina terminada, NEO debe entenderse como una plataforma viva de innovación. Un punto de partida hacia una convivencia tecnológica que apenas comienza.
El precio de un nuevo paradigma

Imágenes cortesía de 1X Technologies
Con un coste de 20 000 USD, NEO no es todavía un producto de consumo masivo, sino una primera generación pionera. Su modelo de suscripción mensual de 499 USD responde a una tendencia emergente: la del robot como servicio (RaaS).
Este enfoque permitirá que hogares, universidades y empresas experimenten con la tecnología sin una inversión inicial inalcanzable, a la vez que favorece una expansión progresiva.
Más allá del precio, el verdadero valor de NEO está en lo que representa: la entrada de la robótica humana en la vida cotidiana. Un experimento social y tecnológico que pondrá a prueba los límites de la interacción entre personas y máquinas.
Tecnología responsable y segura
1X Technologies ha desarrollado a NEO con un firme compromiso con la seguridad, la privacidad y la ética digital.
Su estructura ligera y sus sensores de proximidad reducen riesgos físicos, mientras que los sistemas de control garantizan movimientos suaves y previsibles. Además, la mayoría de los procesos cognitivos se ejecutan localmente, minimizando la exposición de datos personales.
El aprendizaje de NEO se realiza bajo supervisión humana, evitando decisiones autónomas no verificadas. Este modelo híbrido, donde la inteligencia artificial coopera pero no reemplaza, es clave para que la adopción de los robots humanoides sea socialmente aceptada.
Un cambio cultural y tecnológico
La llegada de NEO no solo amplía el horizonte de la innovación, sino que plantea un cambio cultural profundo. Por primera vez, los hogares podrán contar con una entidad autónoma capaz de percibir, razonar y actuar.
Esto no implica reemplazo, sino colaboración: los robots como NEO aspiran a complementar las capacidades humanas, liberando tiempo y energía para actividades más creativas, educativas o sociales.
En sectores como la asistencia a mayores, la educación o el cuidado del hogar, este tipo de tecnologías pueden convertirse en aliados invaluables, siempre que su implementación se acompañe de reflexión ética y regulación adecuada.
El papel de la academia y la investigación
Para las universidades, centros tecnológicos y laboratorios de innovación, NEO representa un campo de estudio inédito.
Su lanzamiento ofrece la oportunidad de investigar la inteligencia artificial encarnada, el aprendizaje adaptativo, la interacción emocional y la integración ética de la robótica en entornos humanos reales.
El futuro de la investigación no será solo digital, sino también corporal y convivencial, con robots que aprenden y evolucionan dentro de nuestras propias rutinas.
Un futuro que empieza en casa
El 1X NEO no es únicamente un robot: es el primer paso hacia una nueva forma de vivir con la tecnología.
Su llegada a los hogares simboliza el tránsito desde la automatización pasiva hacia la convivencia activa, donde las máquinas no solo obedecen, sino que colaboran y aprenden.
Aunque sus funciones iniciales son limitadas, su potencial de evolución es inmenso. Los próximos años serán decisivos para observar cómo NEO —y los robots que lo sigan— se integran en la vida cotidiana, redefiniendo lo que entendemos por hogar, trabajo y compañía.
La prudencia, la curiosidad y la reflexión ética serán nuestras mejores aliadas en este camino.
Porque el futuro ya ha llegado. Y, esta vez, puede caminar, escuchar y aprender de nosotros.