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¿Son necesarios los acuerdos de confidencialidad?

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¿Son necesarios los acuerdos de confidencialidad? - acuerdos de confidencialidad

Si buscamos la palabra idea en el diccionario, nos salen 10 entradas para definirla. Puede ser un conocimiento, la intención de hacer algo, una ocurrencia, un concepto, una opinión… Las ideas pueden ser únicas. Se encuentran en la mente de las personas, de manera distinta para cada una de ellas. Estas ideas son lo que nos hacen especiales, diferentes y únicos a los demás. Cada uno de nosotros posee un mundo entero de ideas que le llevará a ser quien es en la vida. Por lo que es muy importante preservarlas como un tesoro, para evitar que nos las roben, sobre todo cuando se trata de un nuevo proyecto o de la creación de una empresa.

 

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Casos de robo de ideas


A día de hoy, hay muchos emprendedores con ideas de negocio geniales y que pueden tener mucho futuro. Es por eso que es muy importante vigilar a quién confiamos esas ideas, porque puede traernos problemas, como que nos las roben.

Un caso lo encontramos en esta noticia de El Confidencial, que habla sobre la startup Ingenius. Míriam Lao, una de las fundadoras, explicó a este medio que un inversor de Wayra se interesó por el proyecto y quería invertir en él, pero al final resultó que todo había sido una mentira y que lo hizo para conseguir más información sobre el proyecto y, así, apoderarse de la idea.

Otro caso lo encontramos en este artículo, en el que se explica el caso de una chica que escribió un corto junto a su ex pareja, pero sin haberse planteado realizarlo. Cuando ambos lo dejaron, él se apoderó de la idea, realizó el corto, y ganó numerosos concursos con la idea de ella.

Estas no han sido las únicas personas que se han visto involucradas en un robo de idea. Con la aparición de las startups, es cada vez más común, ya que el sector es muy competitivo.

Para evitar que nos sucedan este tipo de cosas a nosotros, una solución sería patentar esta idea, el problema es que en España no es posible. Esta opción sólo la encontramos en Estados Unidos. Por tanto, para poder preservar la idea en España tenemos dos opciones, crear una marca y registrarla en la Oficina Española de Patentes y Marcas antes de contar nuestra idea o realizar un acuerdo de confidencialidad.

Una cuestión importante que debemos tener en cuenta, es que no es muy frecuente que las startups firmen un NDA (o acuerdo de confidencialidad) con su posible inversor, ya que normalmente estos no nos quieren robar la idea. Es recomendable que, antes de contarle información confidencial o sensible de la empresa, estemos seguros de que el inversor realmente quiere invertir. Si es así, y nuestro acuerdo avanza, será el momento de redactar un acuerdo de confidencialidad. En este artículo sobre inversores publicado anteriormente en IEBSchool, hicimos una pincelada sobre este tipo de acuerdos, pero creo que es interesante que profundicemos una poco más en el tema.

¿Qué son los acuerdos de confidencialidad?


Los acuerdos de confidencialidad o los NDA son una buena solución si queremos proteger nuestra idea, ya sea de un negocio, de un proyecto o una información valiosa sobre nuestra startup. La finalidad de estos acuerdos es asegurarse de que la persona con la que hemos hablado sobre nuestra idea no la va a contar ni utilizar por su propio beneficio. En caso de que incumpliera este acuerdo, podríamos demandarlo y exigir una indemnización por daños y prejuicios. Éstos no tienen una regulación específica, ya que se trata de contratos atípicos, pero sí tienen validez legal siempre y cuando se pueda demostrar que se han incumplido.

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¿Qué tipos de acuerdos de confidencialidad podemos realizar?


Podemos encontrar dos tipos de NDA, el mutuo y el unilateral. Cuando hablamos de un acuerdo mutuo, es que ambas partes han intercambiado ideas e informaciones valiosas y que, al firmar este acuerdo, se comprometen a no desvelar dicha información ni a utilizarla para sacar beneficio propio. Por tanto, ambos serían divulgadores y receptores de información.

En cambio, los NDA unilaterales, son aquellos donde encontramos un único divulgador y un único receptor. En este caso, el propietario de la idea la cuenta a otra persona, y ésta, al firmar el acuerdo, se compromete a no utilizar ni divulgar dicha información.

¿Qué debe incluir un acuerdo de confidencialidad?


Esta es la estructura de un NDA:

Debe quedar claro quiénes son las partes que firmarán el acuerdo y compartirán información. Así como por qué se está firmando el acuerdo, es decir, qué tipo de relación se va a establecer: servicios entre las partes, relación entre socios inversores o industriales… Y por último, determinar cuál es el objeto de la información confidencial que se quiere proteger.

En ningún caso es suficiente decir que una parte le dará a la otra información confidencial sobre un tema, porque esta frase puede ser muy ambigua y, en caso de que tengamos que acudir a una reclamación por incumplimiento, no se podría demostrar qué información concreta se compartió y con qué fin. Por este motivo, es muy importante dar una descripción detallada  de la información que se va a dar.

Otra cuestión que se debe mencionar es la finalidad con la que se va a utilizar la información y para qué fin exclusivo podrá utilizarla la parte receptora. Es importante también detallar lo qué se considera o no información confidencial.

Por último, tendrán que quedar por escrito todas las cláusulas que hagan referencia al incumplimiento del acuerdo, en caso que esto suceda.

Los acuerdos de confidencialidad o NDA pueden ser de gran ayuda, en caso que nos veamos obligados a contar nuestra idea de proyecto a terceras personas, ya sea porque quieren formar parte o invertir. Aun así, es recomendable que antes de firmar un acuerdo de este tipo, contemos sólo lo imprescindible a la otra persona, sin entrar en muchos detalles. Además, debemos tener en cuenta que cuando se trata de un inversor para nuestra startup, será mejor hacerle firmar un documento de este tipo, sólo si estamos realmente seguros de que va a invertir en nuestra idea o proyecto.

 

Antes de transformar tu idea en un proyecto debes asegurarte de que has cerrado acuerdos de confidencialidad con las personas que están al tanto de tu idea. Si quieres convertir tu idea en un negocio, IEBS te ofrece el Master en Creación de Empresas: El Start Up del Emprendedor, con el que aprenderás a crear y gestionar tu propia empresa con garantías de éxito.

 

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Ester Ribas

Periodista especializada en marketing y CCO de FormalDocs. Leer más

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